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Cómo y cuándo dejar de usar el chupete
Las técnicas del Dr. Karp que te ayudarán a dejar el chupete.

Escrito por
Dr. Harvey Karp

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¡Los chupetes son herramientas increíbles para calmar a los bebés! Chupar tiene el poder de reducir su ritmo cardíaco, la presión arterial y los niveles de estrés. Los chupetes ayudan a disminuir el llanto después de las vacunas y las pruebas de sangre. Hay muchas razones por las que chupar es un elemento clave de los 5 S's para calmar a los bebés, y ayudarles a dormir. Incluso podría reducir el riesgo de síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL) en tu pequeño. Dicho esto, los padres están constantemente acosados por esa pequeña voz en su cabeza que les dice que es hora de romper con la costumbre del chupete. Entonces... ¿deberías hacerle caso? Y si es así, ¿cuándo es el mejor momento para comenzar a destetar del chupete, y cómo? Aquí tienes todo lo que necesitas saber sobre cómo, cuándo y por qué dejar de usar el chupete.
Una vez que los dientes permanentes de tu bebé aparezcan, chupar un chupete puede tener el efecto secundario no deseado de causar problemas con la alineación de los dientes, el paladar de tu hijo y el crecimiento dental. Aunque chuparse el dedo suele ser más dañino, el uso del chupete aún puede afectar los dientes de tu hijo de esta manera... el uso del chupete es un hábito mucho más fácil de romper y eliminar. Sin embargo, no todo uso del chupete puede o va a crear problemas. Todo depende de la intensidad y la duración del uso del chupete.
¡No hay prisa por deshacerse de un chupete! Los chupetes pueden ser un gran apoyo emocional para niños de hasta 1 a 3 años. Además, los chupetes pueden ser útiles para conciliar el sueño e incluso durante el día para aliviar el estrés en los pequeños, como cuando están enfermos, comienzan la guardería o viajan a un lugar nuevo. Con eso en mente... a medida que los niños se acercan a los 18 meses, tiene sentido comenzar a limitar el acceso al chupete solo a la noche u otras situaciones estresantes antes de quitar completamente el chupete.
Una nota: Si su bebé sufre de infecciones de oído frecuentes, su pediatra puede recomendar cambiar de chupetes al apoyo reconfortante de una mantita de seguridad o animales de peluche. Esto se debe a que succionar un chupete puede alterar la presión en los oídos y conducir a infecciones.
El momento más fácil para dejar el chupete es alrededor de los 6 o 7 meses de edad, porque los niños aún no han desarrollado un apego emocional a su chupete. (Ese apego al chupete suele aparecer después de los 9 meses.) Pero a menos que tu pediatra recomiende dejar de usar el chupete, ¡no te preocupes si tu bebé de 7 u 8 meses todavía ama el chupete! Recuerda, succionar es maravillosamente calmante y ayudará a tu bebé a lidiar con todas las cosas nuevas, locas e impredecibles que encuentran cada día.
Solo ten en cuenta que después de que tu bebé cumpla 9 meses, desarrollará un apego emocional a su chupete. Eso no significa que debas apresurarte a hacer que tu pequeño lo abandone; simplemente prepárate para más protestas después de esta edad y dificultad para deshacerte del chupón.
La mayoría de los niños están emocionalmente preparados para dejar el chupete por sí mismos entre los 2 y 4 años de edad. Por lo tanto, podrías empezar a sembrar la idea en la mente de tu pequeño de que se acerca el día de decir adiós al chupete. De vez en cuando, podrías decir algo como, “Cuando los niños cumplen 3 años, el hada de los chupetes se lleva los viejos y trae nuevos juguetes. ¡Me pregunto qué te traerá!”
¿Cansado de recoger los chupetes que tu pequeño no para de tirar de la cuna? ¿Harto de las infecciones de oído que tu bebé contrae por el chupón? ¿O simplemente estás listo para destetar a tu pequeño de su hábito de succión? No importa, aquí te mostramos cómo eliminar el uso del chupete.
Si has decidido destetar a tu bebé—digamos de 6 o 7 meses—de su chupete, hazlo poco a poco. Primero, limita el uso del chupete a las siestas y la hora de dormir. Eso significa que, si notas que tu pequeño lo usa por costumbre, ofrece una alternativa de estimulación como un muñeco de apego. Luego, utiliza ruido blanco para ayudar a reemplazar la succión como una de las señales de sueño de tu pequeño. La succión y el 'shushing' son parte de las '5 S's' que funcionan para calmar a los bebés y ayudarles a dormir. (La buena noticia: ¡Si ya estás utilizando algunas de las '5 S's' para calmar a tu bebé, puede que ni siquiera note la falta del chupete!) Para sacar el máximo provecho del ruido blanco, opta por sonidos continuos, monótonos y de tono bajo, como el ruido blanco que se presenta en mi 'muñeco de ruido blanco, SNOObear'. (Coloca el SNOObear en el exterior de la cuna del bebé hasta que cumpla 1 año. En ese momento, puedes dejar que tu pequeño abrace al SNOObear como un muñeco de apego y una máquina de ruido blanco sensible.)
Si tu bebé tiene 1 año o más, puedes animar a tu pequeño a usar un objeto de consuelo, como una mantita, un osito como SNOObear, o una bufanda de seda para un poco de confort adicional. ("Cariño, encontraré tu chupete en un segundo. Abraza al osito mientras Mamá lo busca para ti.")
¡Aquí están mis mejores estrategias para ayudar a tu pequeño a decir “adiós” a su chupete para siempre!
El consejo más importante: Sé positivo, pero no te exaltes demasiado. Algunos niños de repente se resisten y deciden que aún no están listos para dejar el chupete. (“Mamá, a veces no soy un niño grande!”) Y no quieres hacer que tu hijo se sienta como un fracaso o hacerle pensar que te está decepcionando. (“Está bien... supongo que te gusta tanto que aún no quieres despedirte de él... ¿tal vez la próxima semana?”)
Si sientes presión para que tu hijo deje el chupete pero sabes en tu interior que tu hijo no está listo, respira hondo.
Primero, recuerda que en las culturas tradicionales, los niños pequeños suelen mamar hasta los 4 años de edad. Segundo, algunos niños tienen un fuerte impulso genético, de uno o ambos lados de la familia, de encariñarse con un objeto reconfortante, ya sea un chupete, pulgar, osito de peluche o mantita de seguridad. Tercero, puede sonar tonto decirlo, pero el chupete de tu pequeño puede convertirse en uno de sus amigos más íntimos y cercanos. Así que... ¡ten cuidado! Y cuarto, ¡nadie va a la universidad usando un chupete!
Descargo de responsabilidad: La información en nuestro sitio NO es un consejo médico para ninguna persona o condición específica. Solo se proporciona como información general. Si tiene alguna pregunta o preocupación médica sobre su hijo o sobre usted mismo, por favor contacte a su proveedor de salud. La leche materna es la mejor fuente de nutrición para los bebés. Es importante que, en preparación para la lactancia y durante la misma, las madres lleven una dieta saludable y equilibrada. La combinación de lactancia materna y alimentación con biberón en las primeras semanas de vida puede reducir la producción de leche materna y es difícil revertir la decisión de no amamantar. Si decide utilizar fórmula infantil, debe seguir las instrucciones cuidadosamente.